sábado, 25 de octubre de 2014

Esa luna color de viejo saxofón, Luis García Montero





Esa luna color de viejo saxofón 
me retendrá en París. 
Esa luna color de vieja mariposa, 
de alma vieja buscando sobre el viento 
ojos para mirar el fin de siglo, 
gatos que son las dudas de la noche. 

Tiéndete junto a mí. Despierta en la memoria 
esa inquietud que guardan los que acaban de amarse, 
la imperceptible prisa de los labios 
que buscaron un cuello donde apoyar su aliento. 
Y déjame mirarte, frente a frente, 
con estos mismos ojos orientales 
que utiliza el amor para observamos.



De mi, Camila

Nunca había sentido algo así,
la vida me mantuvo siempre en paz,
llegaste a abrir las puertas del dolor
y a regalar la soledad.

Tu piel envenenó mi corazón,
dejándome en completa oscuridad
y así en lugar de olvidarte yo,
te fui queriendo mucho más.

Y ahora estás aquí.
Viéndome sufrir.
Dime, ¿cómo debo hacer
para olvidarme de tus besos
y sacarte para siempre de mi?
De mi... De mi... De mi...

Lo supe en el momento en que te vi,
quererte iba a dolerme de verdad,
pero volví a mirarte y comprendí,
que iría contigo hasta el final.

Y ahora estás aquí.
Viéndome sufrir.
Dime, ¿cómo debo hacer
para olvidarme de tus besos
y borrar tu nombre de mi?
De mi... De mi... De mi...

Intente alejarme.
No pensarte más, no pensarte más.
Me dolió entregarme,
como nunca... lo hice jamás.



lunes, 20 de octubre de 2014

Lo que no sabías sobre la gravedad...





La gravedad es una de esas cosas que damos por sentado en la Tierra, pero sin duda es algo bastante más complejo de lo que la mayoría piensa –la idea de la manzana de Newton cayendo del árbol–. Si quieres aprender más del tema, no dejes de leer estos datos curiosos sobre la gravedad.

Bajar a Tierra es difícil

En el caso de los astronautas, la vuelta a la gravedad puede ser difícil para sus cuerpos: sin gravedad se atrofia la masa muscular y se pierde masa ósea. Por esta razón, al volver a la Tierra necesitan tiempo para recuperarse: la presión sanguínea tiene que adaptarse al patrón terrestre en el que se necesita un esfuerzo más grande que en el espacio. Además de las consecuencias físicas de los viajes al espacio, también hay dificultades psicológicas de adaptación; aunque parezca gracioso, muchos astronautas olvidan que las cosas no flotan aquí. 

Para pesar menos: Plutón

Puede que Plutón ya no esté considerado un planeta, pero es una buena opción si lo que queremos es pesar menos: una persona de 68 kilos tan solo pesaría 4.5 kilos allí. Esto se debe a la gravedad del planeta, cuyo punto contrario es Júpiter, en el que la misma persona pesaría 160 kilos.

Marte, el planeta que más visitamos, nos dejaría pesando unos 26 kilos, ya que la atracción gravitatoria de Marte es un 38% de la de la Tierra.

La gravedad no es pareja

Incluso en la Tierra, la gravedad no es pareja ya que el planeta no es una esfera perfecta y su masa se distribuye de forma desigual. Eso genera pequeñas irregularidades en la gravedad, como la que sucede en la bahía de Hudson, en Canadá, donde la gravedad es menor que en otros sitios.

Sin gravedad algunos virus y bacterias serían más fuertes

En el espacio, algunas bacterias son mucho más peligrosas que en la Tierra, por ejemplo aquellas que causan envenenamiento por comida, que se vuelven hasta tres veces más potentes. La falta de gravedad afecta al funcionamiento de los genes y las proteínas de algunas bacterias como la de la salmonela. Así que el riesgo real no está en las bacterias del espacio, sino en las que ya tenemos cuando salimos al exterior.

Agujeros negros en el centro de la galaxia

Los agujeros negros son uno de los objetos más destructivos del universo. Se suelen encontrar en el centro de las galaxias, y nada puede escapar a ellos y su fuerza gravitatoria. En general, no plantean un peligro para nosotros, pero lo cierto es que cada un tiempo determinado el agujero negro envía una llamarada de energía, lo que implica que las estrellas y los planetas no están lo suficientemente cerca del agujero negro como para satisfacer su necesidad.



Fuente:
http://www.culturizando.com







Corazón Delator, Gustavo Cerati


Un señuelo
hay algo oculto en cada sensación
ella parece sospechar parece descubrir en mi
debilidad
los vestigios de una hoguera
oh mi corazón se vuelve delator
traicionándome...

jueves, 2 de octubre de 2014

Hasta Siempre (Puebla), Jan Garbarek






Jueves, día oficial del orgasmo




Bien por la proximidad del viernes o por mera cuestión biológica, está demostrado que el jueves es el día de la semana que predispone a una mayor actividad sexual. Los niveles de testosterona alcanzan su pico y los de estrógeno se multiplican por cinco, sobre todo a primera hora de la mañana, según concluyó un estudio de London School of Economics and Political Science, en el Reino Unido. Este brío que despliega nuestro organismo se palpa también en el ámbito laboral, ya que el jueves resulta ser también la jornada más productiva de la semana. 


Posturas terapéuticas para mejorar el sexo

La clave para mantener la erección y disfrutar plenamente de las relaciones sexuales está en la postura. La clínica Boston Medical Group ha diseñado un programa de movimientos en cada fase que tratan de ayudar a regenerar ciertos hábitos en la relación. En un primer momento, el de los preliminares, los médicos aconsejan tácticas para conocer nuestro propio cuerpo y el de nuestra pareja: juegos, caricias, sexo oral… Preámbulos que consiguen una perfecta lubricación en la mujer y una erección plena en el hombre. En la siguiente fase, aunque el deseo sea intenso, los movimientos deben ser aún suaves y cortos. Si la estimulación es moderada, el hombre conseguirá retrasar la eyaculación y disfrutar del momento con mayor efusión. La posición idónea sería con la mujer en posición horizontal y las piernas estiradas o la postura de la “cuchara”, muy placentera para la mujer. Puede hacerlo también con una penetración profunda, con la mujer boca abajo y las piernas situadas dentro de él para apretar el pene y conseguir una penetración muy satisfactoria para los dos.


Fuente:
http://www.quo.es