viernes, 2 de noviembre de 2012

Amanece un nuevo día, un día nuevo de verdad...


Y nada mejor que un canto a la esperanza en este 
 despertar...


Tengo marcado en el pecho
todos los días que el tiempo
no me dejó estar aquí.
Tengo una fe que madura
que va conmigo y me cura
desde que te conocí.
Tengo una huella perdida
entre tu sombra y la mía
que no me deja mentir.
Soy una moneda en la fuente,
tú mi deseo pendiente,
mis ganas de revivir.
Tengo una mañana constante
y una acuarela esperando
verte pintado de azul.
Tengo tu amor y tu suerte,
y un caminito empinado.
Tengo el mar del otro lado,
tú eres mi norte y mi sur.
Hoy voy a verte de nuevo,
voy a envolverme en tu ropa.
Susúrrame en tu silencio
cuando me veas llegar.
Hoy voy a verte de nuevo,
voy a alegrar tu tristeza.
Vamos a hacer una fiesta
pa' que este amor crezca más.
Tengo una frase colgada
entre mi boca y mi almohada
que me desnuda ante ti.
Tengo una playa y un pueblo
que me acompañan de noche
cuando no estás junto a mí.


Prefiero seguir presente, Manuel Carrasco

Hay que seguir adelante,
a volver a remangarse,
Y a tirar como se puede…
Nadie me enseño el camino
entre tanto desatino
he acertado algunas veces
nada tengo preparado
tan desastre en el pasado
no me salvo en el presente…
Nunca se me dio bien remontar
cuando sale todo mal
hasta el más débil… obligado a hacerse fuerte

Prefiero caer luchando siendo valiente,

ya supe que aunque se gane no es suficiente,
no se puede ser feliz cuando a tu lado lloran,
a veces toca sufrir… no entiendo a mi persona.

Prefiero bailar con ganas aunque no sepa…

Los hilos del corazón mueven mi marioneta,
No quiero ni puedo ser aquello que no soy,
Prefiero seguir presente…
Allá por donde voy.

No se conceden milagros

Y si existen son muy caros
Anestesia para el alma

Necesito que me digas…

Aunque sea de mentira
Que es verdad que no se acaba

A la calle del olvido

Me he mudado y ahora vivo no me sale…
Las palabras…
El futuro dime donde esta
que me invita a respirar y le hago un guiño
A este presente que no avanza.

Frases para reflexionar...




En algún sitio algo increible espera ser descubierto. 
Carl Sagan






 

 A veces lo mejor es guardar silencio, sonreír y seguir adelante.
 

No te detengas, Walt Whitman

No dejes que termine el día sin haber crecido un poco, sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.

No te dejes vencer por el desaliento.

No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte, que es casi un deber.

No abandones las ansias de hacer de tu vida
algo extraordinario.

No dejes de creer que las palabras y las poesías sí pueden cambiar el mundo.

Pase lo que pase nuestra esencia está intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.

Nos derriba, nos lastima, nos enseña,
nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia.

Aunque el viento sople en contra,
la poderosa obra continúa:
Tú puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar, porque en sueños es libre el hombre.

No caigas en el peor de los errores: el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes. Huye.

"Emito mis alaridos por los techos de este mundo", dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples.
Se puede hacer bella poesía sobre pequeñas cosas, pero no podemos remar en contra de nosotros mismos. Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca tener la vida por delante.
Vívela intensamente, sin mediocridad.
Piensa que en ti está el futuro y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte.
Las experiencias de quienes nos precedieron
de nuestros "poetas muertos",te ayudan a caminar por la vida.


La sociedad de hoy somos nosotros:
Los "poetas vivos".

No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas ...

Dalí y Federico García Lorca en la pintura y en la literatura...


Un autorretrato que el pintor español Salvador Dalí dedicó en 1928 al poeta Federico García Lorca sextuplicó su precio estimado en una subasta y se vendió por 43.250 libras (54.000 euros), informó la sala londinense Bonhams.
El dibujo, esbozado en tinta negra en el reverso de una factura por el artista surrealista y dedicado a su compatriota, salió anoche a subasta junto con otros 61 lotes de arte impresionista y moderno, y la casa esperaba rematarlo por un precio de entre 5.000 y 7.000 libras (de 6.250 a 8.750 euros).
La obra revela la "intensa relación que existió entre el pintor y el poeta", que ya había escrito dos años antes su "Oda a Salvador Dalí", explicó la especialista de Bonhams Ruth Graham. "Lorca es uno de los escritores europeos más relevantes del siglo XX y la figura literaria española más conocida desde Cervantes", consideró Graham.
El pintor y el poeta estaban unidos por una profunda amistad y fueron inseparables hasta que Dalí conoció a la que sería su mujer, Gala, recordó la especialista, para quien el dibujo subastado muestra "la cercana relación que unía a esos dos jóvenes en aquel momento". "Dalí continúa despertando un gran interés entre los compradores por lo chocantes y personales que son su obras. La fascinante historia que subyace tras este autorretrato lo convierte en una pieza aún más deseable", analizó Graham.
La obra del pintor español no fue la única que superó las expectativas de la sala de subastas: la pintura del alemán Max Ernst "Violette Sonne" fue vendida por 67.250 libras (unos 84.000 euros), más el doble de las 30.000 libras (37.500 euros) previstos por Bonhams.
Otros trabajos por los que "compradores de todo el mundo compitieron con fiereza", según la especialista de la sala, fueron el óleo "Composition" del cubista francés Fernand Léger, que se vendió por 56.450 libras (70.500 euros) y dos dibujos del simbolista austríaco Gustav Klimt, que se remataron por 22.500 y 12.500 libras (28.125 y 15.625 euros). (Fuente: Terra)




 Oda a Salvador Dalí

Una rosa en el alto jardín que tu deseas.
Una rueda en la pura sintaxis del acero.
Desnuda la montaña de niebla impresionista.
Los grises oteando sus balaustradas últimas.

Los pintores modernos, en sus blancos estudios
cortan la flor aséptica de la raíz cuadrada.
En las aguas del Sena un iceberg de mármol
enfría las ventanas y disipa las yedras.

El hombre pisa fuerte las calles enlosadas.
Los cristales esquivan la magia del reflejo.
El Gobierno ha cerrado las tiendas de perfume.
La máquina eterniza sus compases binarios.

Una ausencia de bosques, biombos y entrecejos
yerra por los tejados de las casas antiguas.
El aire pulimenta su prisma sobre el mar
y el horizonte sube como un gran acueducto.

Marineros que ignoran el vino y la penumbra,
decapitan sirenas en los mares de plomo.
La Noche, negra estatua de la prudencia, tiene
el espejo redondo de la luna en su mano.

Un deseo de formas y límites nos gana.
Viene el hombre que mira con el metro amarillo.
Venus es una blanca naturaleza muerta
y los coleccionistas de mariposas huyen.

Cadaqués, en el fiel del agua y la colina,
eleva escalinatas y oculta caracolas.
Las flautas de madera pacifican el aire.
Un viejo dios silvestre da frutas a los niños.

Sus pescadores duermen, sin ensueño, en la arena.
En alta mar les sirve de brújula una rosa.
El horizonte virgen de pañuelos heridos
junta los grandes vidrios del pez y de la luna.

Una dura corona de blancos bergantines
ciñe frentes amargas y cabellos de arena.
Las sirenas convencen, pero no sugestionan,
y salen si mostramos un vaso de agua dulce.

¡Oh Salvador Dalí, de voz aceitunada!
No elogio tu imperfecto pincel adolescente
ni tu color que ronda la color de tu tiempo,
pero alabo tus ansias de eterno limitado.

Alma higiénica, vives sobre mármoles nuevos.
Huyes la oscura selva de formas increíbles.
Tu fantasía llega donde llegan tus manos,
y gozas el soneto del mar en tu ventana.

El mundo tiene sordas penumbras y desorden,
en los primeros términos que el humano frecuenta.
Pero ya las estrellas ocultando paisajes,
señalan el esquema perfecto de sus órbitas.

La corriente del tiempo se remansa y ordena
en las formas numéricas de un siglo y otro siglo.
Y la Muerte vencida se refugia temblando
en el círculo estrecho del minuto presente.

Al coger tu paleta, con un tiro en un ala,
pides la luz que anima la copa del olivo.
Ancha luz de Minerva, constructora de andamios,
donde no cabe el sueño ni su flora inexacta.

Pides la luz antigua que se queda en la frente,
sin bajar a la boca ni al corazón del hombre.
Luz que temen las vides entrañables de Baco
y la fuerza sin orden que lleva el agua curva.

Haces bien en poner banderines de aviso,
en el límite oscuro que relumbra de noche.
Como pintor no quieres que te ablande la forma
el algodón cambiante de una nube imprevista.

El pez en la pecera y el pájaro en la jaula.
No quieres inventarlos en el mar o en el viento.
Estilizas o copias después de haber mirado
con honestas pupilas sus cuerpecillos ágiles.

Amas una materia definida y exacta
donde el hongo no pueda poner su campamento.
Amas la arquitectura que construye en lo ausente
y admites la bandera como una simple broma.

Dice el compás de acero su corto verso elástico.
Desconocidas islas desmienten ya la esfera.
Dice la línea recta su vertical esfuerzo
y los sabios cristales cantan sus geometrías.
*
Pero también la rosa del jardín donde vives.
¡Siempre la rosa, siempre, norte y sur de nosotros!
Tranquila y concentrada como una estatua ciega,
ignorante de esfuerzos soterrados que causa.

Rosa pura que limpia de artificios y croquis
y nos abre las alas tenues de la sonrisa.
(Mariposa clavada que medita su vuelo.)
Rosa del equilibrio sin dolores buscados.
¡Siempre la rosa!
*
¡Oh Salvador Dalí de voz aceitunada!
Digo lo que me dicen tu persona y tus cuadros.
No alabo tu imperfecto pincel adolescente,
pero canto la firme dirección de tus flechas.

Canto tu bello esfuerzo de luces catalanas,
tu amor a lo que tiene explicación posible.
Canto tu corazón astronómico y tierno,
de baraja francesa y sin ninguna herida.

Canto el ansia de estatua que persigues sin tregua
el miedo a la emoción que te aguarda en la calle.
Canto la sirenita de la mar que te canta
montada en bicicleta de corales y conchas.

Pero ante todo canto un común pensamiento
que nos une en las horas oscuras y doradas.
No es el Arte la luz que nos ciega los ojos.
Es primero el amor, la amistad o la esgrima.

Es primero que el cuadro que paciente dibuja
sel seno de Teresa, la de cutis insomne,
el apretado bucle de Matilde la ingrata,
nuestra amistad pintada como un juego de oca.

Huellas dactilográficas de sangre sobre el oro,
rayen el corazón de Cataluña eterna.
Estrellas como puños sin halcón te relumbren,
mientras que tu pintura y tu vida florecen.

No mires la clepsidra con alas membranosas,
ni la dura guadaña de las alegorías.
Viste y desnuda siempre tu pincel en el aire,
frente a la mar poblada con barcos y marinos.



Federico García Lorca (Publicada en La Revista de Occidente, abril de 1925).







Dibujo de Federico García Lorca expuesto en la exposición que se celebró en Barcelona en las Galerías Dalmau en junio de 1927. Coincidió con el estreno en Barcelona de su obra Mariana Pineda. El dibujo se titula El beso y su significado quedó oculto para todos los que vieron la muestra, pero refleja las cabezas de Dalí y de Lorca confundidas y con los labios juntos. No era extraña esta imagen. El propio Dalí está inmerso en la etapa llamada lorquiana y al menos en doce de sus obras aparece la cabeza de Lorca confundida con la de él mismo, como se aprecia en este otro cuadro



 El poema  Oda a Salvador Dalí es el mejor testimonio de los sentimientos que el pintor inspiraba en el poeta en aquellas fechas. Dicha obra caló profundamente en el pintor y volvería a ella en repetidas ocasiones y le marcó hondamente en la manera de verse a sí mismo. De hecho, la obra es una manifestación clara de una amistad profunda, pero también de una fuerte rivalidad. Ambos artistas representaban modos muy distintos de ver la realidad. 

Sara Baras interpretando al maestro Isaac Albéniz, El Albacín - Ibéria, Sara Baras




La suite para piano Iberia, escrita por Isaac Albéniz, fue compuesta entre 1905 y 1909 (fecha de la muerte del compositor), y es quizás la más importante obra de la literatura pianística española, así como una de las cimas de la música para piano de todos los tiempos. 

A pesar de conocerse como “Suite Iberia” esta obra es más bien una colección de piezas independientes y no están dispuestas siguiendo un orden determinado o significado. En todas ellas Albéniz evoca un lugar, fiesta, canción o danza peninsular con predilección al Sur de España. Sin embargo sus melodías son compuestas libremente partiendo de los elementos rítmicos y melódicos del género en particular. En ocasiones estas referencias se vuelven irreconocibles para catalogarlas dentro de un canto o baile concreto. Son composiciones en general de gran complejidad y riqueza armónica y rítmica. Se observan los ritmos superpuestos, los cruces de manos, saltos de dificultad extrema, acordes imposibles, la dificultad de lectura. Como refiere el maestro Piero Rattalino, podemos comparar esta música por su riqueza tímbrica y la gran complejidad de movimientos de masas con la música de Liszt y algunos virtuosos posteriores, y por las superposiciones de timbres diversos en la misma zona del teclado con la música de Debussy y Ravel. En ocasiones parece necesitarse “dos teclados” o incluso “tres manos” para realizar la amplísima variedad de ataques. Esta continua “búsqueda” sonora es señalada con numerosos términos: souple (blando), sambre (sombrío), vibrant (vibrante), enveloppé (encubierto), pppp, ffff ... Sorprendentemente toda la originalidad y frescura características de la obra nacen de un orden y una estructura muy definida. Nada es aleatorio: “la fórmula ideal en arte debería ser `variedad dentro de la lógica’”

De ella dijo Olivier Messiaen: “es la maravilla del piano, ocupa quizá el más alto puesto entre las más brillantes muestras del instrumento rey por excelencia”. No debe confundirse con la Suite española Op. 47, también de Albéniz.

Consta de cuatro cuadernos de tres piezas cada uno.
En Iberia todo no es sólo bella música .Presenta una dimensión política y filosófica y resume la idea que tenía Albéniz de la cultura española y su lugar en la civilización europea. En la vida de Albéniz como en su música existe una dicotomía entre los hechos y la ficción, entre lo real y lo imaginario, y también entre lo viejo y nuevo. A lo largo de los cuatro cuadernos de Iberia Albéniz evoca una España ideal pero al mismo tiempo la España real que conoció y vivió. En ella queda pianísticamente expresado el sonido universal de lo español tal y como Albéniz lo añoraba, porque sintió y escribió Iberia desde el exilio, desde la añoranza de su tierra. Su personalidad que pasaba de la melancolía a la euforia se ve reflejada en esas estampas de gran sentido romántico. 
El Cuaderno 3 se dio a conocer en París, en casa de la Princesa de Polignac, en 2 de enero de 1908. Está formada por <<El Albaicín>>, <<El Polo>> y <<Lavapiés>>.

 
El Albaicín. Pieza inspirada en este barrio granadino que mantiene un extraordinario y original juego rítmico. Éste se mantiene a lo largo de toda la página, con infinitas facetas. Parece un cante jondo melancólico, unas veces misterioso y otras apasionado. Son de destacar el rítmico y originalísimo arranque de la pieza así como las numerosas referencias a arpegios y rasgueos característicos de la guitarra flamenca. La primera sección alterna una rica y viva colección de temas de resonancias flamencas con otro tema más pausado, misterioso y profundo, como el cantaor que desgrana su quejío con un ligero acompañamiento de fondo. La segunda sección, de gran contraste con la anterior, presenta un bellísimo tema de un lirismo apasionado, arrebatador. Finalmente, una tierna, casi amorosa reexposición del mismo tema remata la pieza de manera magistral. El Albaicin es considerada por muchos la obra maestra dentro de esa gran obra maestra que es Iberia.

Hoy os dejo esta adaptación a la danza en el arte de Sara Baras, espero que la disfrutéis...