lunes, 5 de mayo de 2014

Elegia Nocturna, Jose Angel Buesa



Quién nos hubiera dicho... Que todo acabaría
como acaba en la sombra la claridad del día.

Fuiste como la lluvia cayendo sobre un río
para que fuera tuyo... todo lo que era mío.

Fuiste como una lámpara que se encendió en mi vida,
yo la soplé de pronto... Pero siguió encendida.

Fuiste un río ilusorio cantando en un desierto
y floreció la arena como si fuera cierto.

Mi amor fue una gaviota que construyó su nido
en lo alto de un mástil... Ahora el buque se ha ido.

Ahora me envuelve un hosco silencio de campana
donde sólo resuena tu campana lejana.

Y como un surco amargo... Que se negara al trigo
ahora mi alma no sueña... Por no soñar contigo.




By Your Side, Sade

(...)
Oh, cuando tengas frío,
Yo estaré ahí para abrazarte muy cerca de mi
Cuando estés fuera y no puedas entrar
Te enseñaré, eres mejor de lo que sabes
Cuando te pierdas, cuando estés solo y no puedas regresar
Te encontraré cariño, te llevaré de vuelta a casa

Si quieres llorar
Yo estaré aquí para secar tus ojos
Y en poco tiempo estarás mejor...

(...)

Los Conjurados, Jorge Luis Borjes




Al cabo de los años he observado que la belleza, como la felicidad, es frecuente. No pasa un día en que no estemos, un instante, en el paraíso. No hay poeta, por mediocre que sea, que no haya escrito el mejor verso de la literatura, pero también los más desdichados. La belleza no es privilegio de unos cuantos nombres ilustres. Sería muy raro que este libro, que abarca unas cuarenta composiciones, no atesorara una sola línea secreta, digna de acompañarte hasta el fin. Los Conjurados, Jorge Luis Borges(...)»


La noche joven

Ya las lustrales aguas de la noche me absuelven
de los muchos colores y de las muchas formas.
Ya en el jardín las aves y los astros exaltan
el regreso anhelado de las antiguas normas
del sueño y de la sombra. Ya la sombra ha sellado
los espejos que copian la ficción de las cosas.
Mejor lo dijo Goethe: lo cercano se aleja.
Esas cuatro palabras cifran todo el crepúsculo.
En el jardín las rosas dejan de ser las rosas
y quieren ser la Rosa.



Las siete ecuaciones más importantes de la historia



Comprender la complejidad del universo en su totalidad es imposible. Sin embargo, podemos establecer que un sinfín de fenómenos responden a determinadas condiciones y su comportamiento es predecible o posible de determinar. Asimismo, hay propiedades y leyes universales invariables. Y para todas estas cosas, hay una ecuación que las explica. Así que hoy, te propongo conocer algunas de las ecuaciones que cambiaron la historia.



Teorema de Pitágoras: a²+b²=c²




Seguro ya la conoces y has tenido que usarla más de una vez en tu vida. La fórmula o ecuación pitagórica es esencial en el campo de la geometría eculideana y refiere a la relación en el plano de los lados de un triángulo. De tal manera, la suma del cuadrado de los catetos de un triángulo (a² + b²) equivale al cuadrado de la hipotenusa (c²).



Ley de Gravitación universal de Newton: F= G [(m1 x m2)/r²]




Esta fórmula fue fundamental para entender cómo actúa la gravedad entre dos objetos. Dicha fuerza (F) depende una variable universal constante (G) y las masas respectivas de dos objetos. Vale aclarar que esta ecuación fue suficiente para describir el comportamiento de los planetas y otros cuerpos en el universo hasta que Einstein enunciara la teoría de la relatividad general, más de 2 siglos después que Newton.



La fórmula de Euler para los poliedros: V+C-A=2



Esta sencilla ecuación es una de las primeras variantes topológicas, es decir, una propiedad espacial común a diferentes espacios con las mismas características. Así, establece que, cualquiera sea el poliedro, si a la suma de sus vértices y caras se le resta el número de aristas, el resultado será siempre 2. Por ejemplo, un cubo tiene 8 vértices, 6 caras y 12 aristas; entonces: 8+6-12=2. Esto se cumplirá para cualquier poliedro regular o irregular.



Ecuación de onda: ∂²u/ ∂t²=c²(∂²u/∂x²)



La ecuación de onda formulada por D'Alembert, en 1746, es una ecuación diferencial que nos permite comprender el movimiento de distintas ondas, algo muy importante para estudiar el electromagnetismo o las propiedades del sonido, entre otras.



Segunda Ley de Termodinámica: dS≥0


La ecuación de la segunda ley de la termodinámica determina de manera sucinta que en un sistema el calor se transmite siempre de un cuerpo caliente a otro más frío hasta lograr un equilibrio térmico, de una manera unidireccional e irreversible, ya que en la ecuación existe una variable llamada entropía que mide el desorden del sistema y que refiere a su irreversibilidad. Así, la variación de entropía en un sistema aislado debe ser mayor o igual a 0.



Ecuación de Schrodinger: iħ (∂/∂t).ψ=Hψ


La ecuación de Schrodinger explica una de las nociones básicas de la mecánica cuántica y el comportamiento de las partículas atómicas. Además, está ligada al célebre Gato de Schrodinger.



Teoría de la relatividad especial: E= mc²


Nadie puede negar que esta es la ecuación más famosa de la historia, y que plantea que la materia y la energía son equivalentes. La importancia de la ecuación de Albert Einstein para comprender el universo es superlativa.


Fuente:
http://www.ojocientifico.com