Ese es el material con el que el propietario y creador de restaurantes Martin Sanchez ha construído una capilla.
Ha creado un oasis urbano, un jardín de Edén, oculto detrás de arbustos,
árboles y una valla del hierro forjado. Dentro del restaurante Tacos de
Tio de Martin sobre la Avenida de Posada de Misión en la Orilla,
California.
Oculto el Sr. Sanchez ha estado trabajando sobre su creación durante
casi 10 años. El agua fluye de la fuente de un jardin hecho de los
pedazos rotos de arcilla y viejos tubos, bicicletas desechadas, muñecas y
otros artículos.El resultado es cuanto menos llamativo.
Muñecas Barbie, botellas de perfume y codos de tubo. Hay un camino
increíble por el cual una tuberia crea obstáculo al agua, donde uno
puede andar sin mojarse.
Dentro del restaurante, Sanchez ha creado los mosaicos de azulejo de
criaturas de mar como langostas y agujas. Los mosaicos están por todas
partes, cubriendo las mesas y pisos.
Un día Meher Baba preguntó a sus mandalies lo siguiente:- ¿Por que la gente se grita cuando están enojados?:
Los hombres pensaron unos momentos:
Porque perdemos la calma - dijo uno - por eso gritamos.-
Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu lado? -
preguntó Baba - No es posible hablarle en voz baja? ¿Por qué gritas a
una persona cuando estás enojado?
Los hombres dieron algunas otras respuestas pero ninguna de ellas satisfacía a Baba.
Finalmente él explicó:
Cuando dos personas están enojadas, sus corazones se alejan mucho.
Para cubrir esa distancia deben gritar, para poder escucharse. Mientras
más enojados estén, más fuerte tendrán que gritar para escucharse uno a
otro a través de esa gran distancia.
Luego Baba preguntó:- ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran?
Ellos no se gritan sino que se hablan suavemente,¿por qué? Sus corazones están muy cerca.
La distancia entre ellos es muy pequeña.
Baba continuó - Cuando se enamoran más aún, qué sucede? No hablan,
sólo susurran y se vuelven aun más cerca en su amor. Finalmente no
necesitan siquiera susurrar, sólo se miran y eso es todo. Así es cuan
cerca están dos personas cuando se aman.
Luego Baba dijo:-
Cuando discutan no dejen que sus corazones se alejen, no digan
palabras que los distancien más, llegará un día en que la distancia sea
tanta que no encontrarán más el camino de regreso.
...Carlos
II, «el Hechizado», Desde muy pequeño padeció de desarreglos
intestinales que le duraron toda la vida, agravándose cuando su
creciente prognatismo le dificultó cada vez más la masticación. Sufrió
retardo motor y tuvo una enorme cabeza que se ha atribuido a una posible
hidrocefalia. A los seis años tuvo el sarampión y la varicela a los
ocho. A los diez años pasó la rubéola, y a los once sufrió la viruela.
Alrededor de los treinta y siete años, sus desmayos son tan largos que
duran a veces más de dos horas. A los treinta y dos años perdió el pelo.
Cuando tenía treinta y ocho años comenzó a acusar hinchazones en los
pies, luego en las piernas y más tarde en las manos, la cara y la
lengua, dificultándole la palabra. Padecía congojas que terminaban en
desmayos. Era un epiléptico, con grandes ataques hacia el final de su
vida. Durante su última enfermedad, se acordó colocarle pichones recién
muertos sobre la cabeza y entrañas calientes de cordero
sobre el
abdomen.
...La dramatización de La Guerra de los Mundos escenificada por Orson
Welles y el Mercury Theatre para la CBS se ha considerado
tradicionalmente uno de los hitos de la historia de la comunicación de
masas, la demostración del gran poder que en 1938 tenía la radio.
Los sociólogos apuntan hoy al poder de los medios no como el
causante de la histeria de masas por la retransmisión del ataque, sino
como el creador del mito de que una gran parte de la población se tomó
en serio la invasión alienígena.
Al eco de los medios, se unió en la creación de la leyenda sobre un
trabajo científico cuyas conclusiones se antojan ahora alejadas de la
realidad. «Existe un creciente consenso entre los sociólogos acerca de
que la extensión del pánico, tal como la describió Cantril, fue
enormemente exagerada», señala Bartholomew, quien admite, no obstante,
que «hay pocas dudas de que muchos americanos resultaron verdaderamente
asustado», hasta el punto de emprender la huida del peligro,
especialmente en Nueva Jersey y Nueva York. Los marcianos aterrorizaron a
muchos oyentes; pero no a 1,2 millones, sino posiblemente solo a miles.
...A priori podemos pensar que una caida libre desde 5000m de altura, por
ej desde un helicóptero o avión, puede ser mucho más mortal que una
caida desde el piso 50 de un gran edificio, a unos 150m de altura, pero
estaremos equivocados, las posibilidades de sobrevivir son las mismas.
Cuando un objeto desciende en caida libre actúan dos fuerzas, la
fuerza de la gravedad, que atrae el cuerpo hacia el suelo (el peso) y la
resistencia del aire, que frena el objeto. El peso digamos que se
mantiene constante (las variaciones son ínfimas), en cambio, la
resistencia del aire aumenta a medida que crece la velocidad. Cuando el
cuerpo que cae alcanza cierta velocidad la resistencia del aire es tan
fuerte que el cuerpo deja de acelerar y se mantiene a velocidad
constante, lo que se llama velocidad límite.
Una altura de 50 pisos es suficiente para alcanzar dicha velocidad
límite, por lo tanto, no importa que el cuerpo caiga de más alto,
siempre caerá a dicha velocidad límite.
El viento es un caballo: óyelo cómo corre por el mar, por el cielo.
Quiere llevarme: escucha cómo recorre el mundo para llevarme lejos.
Escóndeme en tus brazos por esta noche sola, mientras la lluvia rompe contra el mar y la tierra su boca innumerable.
Escucha como el viento me llama galopando para llevarme lejos.
Con tu frente en mi frente, con tu boca en mi boca, atados nuestros cuerpos al amor que nos quema, deja que el viento pase sin que pueda llevarme.
Deja que el viento corra coronado de espuma, que me llame y me busque galopando en la sombra, mientras yo, sumergido bajo tus grandes ojos, por esta noche sola descansaré, amor mío.
Qué son, por qué aparecen cada año, cuándo es el
mejor momento para verlas y cómo preparar una buena observación este fin
de semana.
Cómo localizar las Perseidas en el cielo
Las Perseidas llegan el sábado: consejos para verlas
Las Perseidas, popularmente conocidas como «lágrimas de San Lorenzo»,
podrán contemplarse este fin de semana. Aquí te explicamos todo lo que
debes saber para disfrutar al máximo de la lluvia de estrellas más
hermosa del año:
1-¿Qué es una lluvia de estrellas?
Pues ni lluvia ni estrellas. Detrás de un nombre tan poético se esconden en realidad las diminutas partículas de polvo,
algunas menores que granos de arena, que dejan los cometas a lo largo
de sus órbitas alrededor del Sol. Cuando la corriente de partículas es
atravesada por la Tierra, estas se desintegran al entrar a gran
velocidad en la atmósfera terrestre, creando los conocidos trazos
luminosos, las estrellas fugaces, que reciben el nombre científico de meteoros.
2-¿Y qué son las Perseidas?
Las
Perseidas es la famosa lluvia de estrellas del mes de agosto. La lluvia
de meteoros suele tener su máxima actividad entre los días 12 y 13 de
agosto, aunque el fenómeno es apreciable en menor intensidad desde la
segunda mitad de julio hasta finales de este mes. El nombre de Perseidas
se debe a que su radiante, el lugar de donde parecen salir, se
encuentra en la constelación de Perseo.
3-¿Por qué aparecen cada año con regularidad?
Porque cada año por estas fechas nuestro planeta cruza la órbita del cometa Swift-Tuttle,
que tiene un período de 133 años y que pasó cerca del Sol por última
vez en 1992. Entonces, sus partículas entran en contacto con la
atmósfera terrestre y crean los famosos trazos luminosos.
4-¿Qué tienen que ver con la leyenda de Perseo?
La lluvia del verano debe su nombre a la constelación de Perseo,
de donde parecen venir los meteoros. Precisamente, la leyenda dice que
Perseo, un semidiós griego, nació de la lluvia de oro con la que Zeus
embarazó a Dánae. Los antiguos helenos ya relacionaban las Perseidas con
esta hazaña. Luego, el vástago adquiriría fama por cortar la cabeza de
Medusa, que petrificaba a sus adversarios.
5-¿Cuál es el mejor momento para observarlas?
Este
año, el pico máximo de la lluvia de estrellas nos pillará de día, entre
las 14.00 y las 16.30 (hora peninsular española) del domingo, así que
el mejor momento para observarlas coincidirá con las noches anterior y
posterior al mismo, es decir, las noches del sábado al domingo y del
domingo al lunes. El período óptimo de observación será la primera parte
de la noche, antes de que la Luna haga su aparición sobre el horizonte,
entre las 22.00 horas y las dos o las tres de la madrugada.
6-¿Cuál puede ser el mayor problema para la observación?
Aparte
de un cielo nublado, que puede estropear cualquier observación
astronómica, la Luna puede dificultar la visión. Estará en fase
menguante y su brillo no molestará, pero se encuentra cerca del
radiante, la zona del cielo de la que parece proceder la lluvia de
estrellas.
7-¿Serán mejores que el año pasado?
Este
año, aunque no perfecto, será mucho mejor que el anterior porque en
2011 hubo luna llena, lo que impidió la observación, pero este verano el
satélite natural de la Tierra estará en fase menguante, que afectará
también la visión de estos bólidos, pero en menor proporción.
8- ¿Cuántos meteoros se verán?
Las
Perseidas son una de las lluvias más espectaculares. En esta ocasión,
la lluvia promete unos cien meteoros en su pico máximo, que nos
perderemos al ser de día. En nuestro tiempo de observación, pueden ser
algunos menos.
9- ¿Qué necesito para ver la lluvia de estrellas?
La
mejor forma de disfrutar de la lluvia de estrellas es a simple vista,
sin prismáticos ni telescopios, y en una posición cómoda que permita ver
el mayor campo de cielo posible; por ejemplo, tumbado en una hamaca. Es
necesario tener el horizonte despejado hacia el Nordeste, donde se
encuentra el radiante, sin obstáculos para la vista como montañas,
edificios o grandes árboles. Además, la zona debe ser oscura, alejada de
las luces de las ciudades. El Instituto de Astrofísica de Canarias
(IAC) recomienda mirar a unos 20º alrededor del radiante, ya que la
mayor parte de los meteoros aparecerá en esta región.
10-¿Y si quiero verlas en compañía?
Como
dos pares de ojos ven mejor que uno, una buena opción para no perderse
el espectáculo es participar en alguno de los encuentros organizados por
las distintas sociedades astronómicas en toda España. El Planetario de
Pamplona, por ejemplo, organiza una excursión nocturna al mirador de la
Foz de Arbayún. La Sociedad Astronómica de Murcia se instalará en Cabezo
Gordo, en Torre Pacheco, mientras que la Sociedad Astronómica Granadina
subirá a la Estación de Esquí de Borreguiles en el parque natural de
Sierra Nevada. El Planetario de Mallorca celebra el sábado la Noche de
las Estrellas.
Publicado enABC.es Ciencia
Dice el refrán que “la lluvia por San Lorenzo, siempre llega a tiempo”. Y
es que, cuando se aproxima la onomástica de este santo, el día 10 de
agosto, los agricultores miran al cielo esperanzados en busca de una
llovizna que de un respiro a los campos y declare una tregua al calor
del verano. Pero dejando a un lado las cuestiones climatológicas, lo
cierto es que la festividad de San Lorenzo nos trae cada año una lluvia
de otro tipo, especial y diferente, en la que el cielo, en lugar de
aguaceros, decide regalarnos cientos de estrellas fugaces.
Resulta curioso que, pese a tratarse de fenómenos con una clara
explicación científica, las lluvias de estrellas –y ésta en particular-
no dejan de suscitar asombro y expectación. El componente mágico y
ancestral, una vez más, suele eclipsar a lo científico.
Además, no hay que olvidar el toque
romántico y atávico que aporta la mitología griega con el sugerente mapa
del cielo nocturno, lleno de centauros, caballos alados, carros y
dioses. Normalmente las lluvias de estrellas se bautizan con el nombre
de la constelación desde la cual parecen provenir los meteoros o estrellas fugaces, lo que científicamente se denomina punto radiante. En el caso de las Lágrimas de San Lorenzo, el radiante se localiza en la constelación de Perseo, de ahí que este fenómeno se conozca también con el nombre de Perseidas
Formada por estrellas no excesivamente
brillantes, Perseo se ubica junto a la constelación de Andrómeda. La
historia de amor entre ambos personajes mitológicos hace que las Perseidas adquieran un cierto tinte de romanticismo. Aunque ubicados en constelaciones diferentes, los griegos relacionaron a Perseo, hijo de Zeus, con Andrómeda,
princesa de Etiopía.
Cuenta la mitología que para expiar un crimen de
su madre, Andrómeda fue ofrecida en sacrificio a un temible monstruo
marino. Encadenada a una roca a orillas del mar, la princesa esperaba su
destino cuando Perseo acudió en su rescate y acabó con el animal, para
después reclamar a Andrómeda como esposa.
Y es que, la figura de Perseo y las
Perseidas están envueltas en simbología. Antes de engendrar a su hijo,
el propio Zeus tuvo que colarse en la estancia donde estaba recluida Dánae,
la madre de Perseo. Para entrar en la habitación, el dios se vio
obligado a metamorfosearse, según cuenta el poeta Publio Ovidio Nasón en
Las Metamorfosis. ¿Y en qué se transformó Zeus? En una espectacular y sorprendente lluvia de oro…Nada más, y nada menos…
Y para añadir un poco más de magia y misterio a esta popular lluvia de estrellas, tenemos a un cometa que aparece y desaparece… El Swift-Tuttle, responsable del fenómeno de las Perseidas,
anduvo ‘perdido’ debido a ciertas imprecisiones cometidas en la
estimación de su órbita. Se llegó a pensar incluso que se había
desintegrado, aunque resultó que el periodo en el que el cometa
lograba completar su órbita no era de 120 sino de casi 130 años, y
volvió a reaparecer en 1992 como si nada para alivio de científicos y
aficionados.
En definitiva, lo ideal para disfrutar
de esta lluvia de estrellas es buscar un lugar oscuro, alejado de
cualquier foco de luz molesta, y tumbarnos, si es posible, en un sitio
cómodo y tranquilo para mirar al cielo mientras soñamos con deseos que
se cumplen y recordamos la historia de amor entre Perseo y la bella
Andrómeda.
Dánae recibiendo la lluvia de oro. Tiziano
El pintor italiano Tiziano recreó el
momento en que Dánae recibe a Zeus en forma de lluvia de oro y engendra a
Perseo. Crédito: Tiziano Vecellio di Gregorio. Año 1553. Colección
Real. Museo del Prado (Madrid).
La figura central está recostada sobre la cama, con las piernas
dobladas. A su derecha hay un perro pequeño, que se reputa un atributo
de la cortesana. En la parte derecha hay una criada cuya espalda oscura
contrasta con la blancura de Dánae; del mismo modo, hay una oposición
clara entre su rostro envejecido y la juventud de la princesa de Argos.
Esta sirvienta está recogiendo con un delantal las pepitas de oro que
caen en forma de lluvia dorada, desde las nubes tormentosas que dominan
el centro de la parte superior.Estas figuras se sitúan en un espacio indefinido, ni exterior ni interior; se ven las cortinas y las nubes al fondo.