¡Los hexágonos están
en todas partes!.
Tanto si buscamos a nivel atómico, en células vivas, dispositivos artificiales o colonias de abejas, podremos encontrar un tipo característico de orden hexagonal. Lo llamamos empaquetamiento compacto y es de hecho el más efectivo para meter el mayor número de objetos en el mínimo espacio.
Tanto si buscamos a nivel atómico, en células vivas, dispositivos artificiales o colonias de abejas, podremos encontrar un tipo característico de orden hexagonal. Lo llamamos empaquetamiento compacto y es de hecho el más efectivo para meter el mayor número de objetos en el mínimo espacio.
La Calzada de los Gigantes
Es una extensa formación volcánica
compuesta por unas 40.000 columnas de basalto que se formaron hace unos
60 millones de años.
Cada columna de basalto tiene
entre 30 y 60 centímetros de ancho, la mayoría de forma hexagonal,
aunque también hay muchas que tienen 4 o 5 lados y otras con mas de 10
lados. Algunas de las columnas más altas, llegan a alcanzar los 12
metros de altura.
Su particular forma de pavimento hexagonal fue
origen de una leyenda irlandesa, según la cual dos gigantes enemigos,
Finn en Irlanda y Bennandoner en Escocia, se lanzaban
rocas continuamente el uno al otro. Tanta roca arrojada formó un camino
de piedras sobre el mar, que fue aprovechado por el gigante escocés para
alcanzar Irlanda y atacar a Finn. Advirtiendo la llegada de
Bennandoner, la esposa de Finn disfrazó a su marido de bebé. Cuando el
gigante escocés vio a tan enorme criatura, pensó que si el bebé era tan
grande, su padre y enemigo debía ser inmenso, y abandonó atemorizado
Irlanda. En su camino de vuelta, fue pisando fuertemente las rocas para
que se hundieran en el mar y Finn no pudiera perseguirle. Debido a ello,
únicamente se conserva el final de la calzada, en la costa irlandesa.
Geológicamente, la explicación no es tan épica, aunque no menos
violenta; la Calzada de los Gigantes es producto de una gran erupción
volcánica, acaecida hace unos 60 millones de años, al enfriarse el magma.
¿Por
qué las burbujas son redondas?
Por eficiencia.
En la naturaleza, todos los sistemas tienden a tener la menor energía
posible. ¿Cómo se logra esto en las burbujas? Teniendo la
menor superficie. Es decir, estando lo menos estirada posible. El volumen
de una burbuja está determinado por la cantidad de aire que tiene
en su interior. Si comparamos un cubo, una pirámide y una esfera
del mismo volumen, descubriremos que la superficie de la esfera siempre
es menor. ¿Cómo consiguen las burbujas tener la menor energía?
¡Con su forma esférica!
Roberto
Hojman Guiñerman, Físico
Presidente Comisión Chilena de Energía Nuclear
Director de Programa Centros de Investigación Avanzada FONDAP - FONDECYT
Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica, CONICYT
Presidente Comisión Chilena de Energía Nuclear
Director de Programa Centros de Investigación Avanzada FONDAP - FONDECYT
Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica, CONICYT
¿Quieres
saber más?
En
la naturaleza, todos los sistemas tienden a tener la mínima energía
posible. ¿Y cómo lo hace una burbuja?, tratando de estar lo
menos estirada que pueda, es decir, conservando la menor superficie que
le sea permitida.
Pensemos en un elástico. Cuanto más se estira, sus moléculas toman mayor distancia acrecentando su energía, la que podemos liberar si lo soltamos.
Mientras más grande es la superficie de una pompa de jabón, o sea, tanto más alejadas se encuentran sus moléculas, mayor es la energía que adquiere. Cuando reventamos la burbuja, liberamos esa energía y muchas gotitas saltan lejos.
¡Pero la cantidad de aire que tiene dentro es fija! O sea, el volumen de la burbuja está determinado por la porción de aire atrapado en su interior.
¿Podríamos fabricar burbujas de otras formas?
Una de las primeras personas en investigar las superficies jabonosas fue el físico belga Joseph A. F. Plateau (1801-1883), quien formuló el problema que lleva su nombre, consistente en determinar la superficie del área mínima limitada en el espacio por un contorno cerrado.
Supongamos que hay 8 cm3 de aire atrapado dentro de una burbuja. Si ésta fuera cúbica, tendría 2 cm de arista. Como sabemos, los cubos tienen 6 caras y la superficie de cada una de ellas, en este caso, es de 4 cm2.
Pensemos en un elástico. Cuanto más se estira, sus moléculas toman mayor distancia acrecentando su energía, la que podemos liberar si lo soltamos.
Mientras más grande es la superficie de una pompa de jabón, o sea, tanto más alejadas se encuentran sus moléculas, mayor es la energía que adquiere. Cuando reventamos la burbuja, liberamos esa energía y muchas gotitas saltan lejos.
¡Pero la cantidad de aire que tiene dentro es fija! O sea, el volumen de la burbuja está determinado por la porción de aire atrapado en su interior.
¿Podríamos fabricar burbujas de otras formas?
Una de las primeras personas en investigar las superficies jabonosas fue el físico belga Joseph A. F. Plateau (1801-1883), quien formuló el problema que lleva su nombre, consistente en determinar la superficie del área mínima limitada en el espacio por un contorno cerrado.
Supongamos que hay 8 cm3 de aire atrapado dentro de una burbuja. Si ésta fuera cúbica, tendría 2 cm de arista. Como sabemos, los cubos tienen 6 caras y la superficie de cada una de ellas, en este caso, es de 4 cm2.
2cm | La
superficie total de este cuerpo sería 6 veces la de una de
sus caras, es decir 24 cm2. Esta cifra, excede la superficie apenas
superior a los 19 cm2 que ha demostrado ocupar una burbuja adoptando
la forma esférica. Para una pompa de jabón, este formato resulta ser energéticamente más conveniente que el cúbico. Intenta averiguar qué pasaría con ella si tuviese forma de pirámide, siempre manteniendo en su interior 8 cm3 de aire. |
Usando
técnicas más sofisticadas, se puede demostrar que la
mejor burbuja, desde el punto de vista de minimizar la energía
almacenada en su superficie, es la esférica. Por lo tanto,
no podríamos fabricar una que no tuviese esta forma, ya que
no sería eficiente ni estable.
¿Qué
saben las abejas de geometría?
![]() |
Ya los romanos
se preguntaban por qué las abejas construyen sus colmenas utilizando
compartimientos hexagonales, pero debieron pasar siglos, ¡hasta
1999! para que la ciencia entregara una respuesta definitiva: la forma
hexagonal es la manera más eficiente de subdividir el plano, utilizando
el menor perímetro posible.
Las celdas de una colmena son inicialmente cilindros. Pero, al apoyarse unos con otros, la presión los redistribuye y comienzan a adoptar la forma hexagonal. Esto sucede porque los hexágonos minimizan el perímetro de una sección y, por lo tanto, la cantidad de material necesario para hacerla. ¡Las abejas resultan ser insectos muy eficientes! | |
Raúl
Gouet Bañares, Ingeniero Matemático
Doctor en Matemática, Universidad de Paris, Francia
Profesor Asociado Departamento de Ingeniería Matemática
Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas
Universidad de Chile
Doctor en Matemática, Universidad de Paris, Francia
Profesor Asociado Departamento de Ingeniería Matemática
Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas
Universidad de Chile
¿Quieren
saber más?
En Roma se
preguntaban por qué las abejas construían sus colmenas utilizando
compartimentos hexagonales. En Grecia, el matemático Papus de Alejandría
(284-305), también se cuestionaba lo mismo... sin embargo, sólo
siglos después se encontraría respuesta a este dilema.
Las abejas, al guardar la miel, necesitan hacerlo en celdillas individuales. Para aprovechar el espacio al máximo, las distribuyen de modo que formen un mosaico sin huecos ni salientes, lo que pueden lograr únicamente con triángulos, cuadrados o hexágonos. ¿Por qué eligieron entonces estos últimos, si son más difíciles de construir?
La solución pasa por un problema isoperimétrico, que en griego significa "igual perímetro". Papus ya había demostrado que, entre todos los polígonos regulares de similar periferia, encierran más área aquellos que poseen un mayor número de lados. Un círculo, entonces, es la figura que encierra el espacio más grande en un contorno determinado, pues su número de lados es infinito.
Inicialmente, las celdas de una colmena son cilindros, pero al apoyarse unas con otras, la presión las redistribuye hasta adoptar la forma hexagonal, que representa la manera más efectiva de subdividir el plano, utilizando el menor perímetro posible. Los hexágonos minimizan el “borde” de una sección y, así también, la cantidad de material necesario para hacerla. Por eso las abejas construyen sus celdillas de esta forma, ya que, gastando la misma cantidad de cera, consiguen mayor superficie para guardar su miel. ¡Qué eficientes resultaron ser estos insectos!
Podemos encontrar casos similares en varias otras situaciones. Por ejemplo, ¿has visto lo que sucede cuando se amontonan pompas de jabón? Una burbuja es perfectamente esférica cuando está aislada, pero fíjate en el aspecto que adquieren cuando se pegan unas a otras.
Las abejas, al guardar la miel, necesitan hacerlo en celdillas individuales. Para aprovechar el espacio al máximo, las distribuyen de modo que formen un mosaico sin huecos ni salientes, lo que pueden lograr únicamente con triángulos, cuadrados o hexágonos. ¿Por qué eligieron entonces estos últimos, si son más difíciles de construir?
La solución pasa por un problema isoperimétrico, que en griego significa "igual perímetro". Papus ya había demostrado que, entre todos los polígonos regulares de similar periferia, encierran más área aquellos que poseen un mayor número de lados. Un círculo, entonces, es la figura que encierra el espacio más grande en un contorno determinado, pues su número de lados es infinito.
Inicialmente, las celdas de una colmena son cilindros, pero al apoyarse unas con otras, la presión las redistribuye hasta adoptar la forma hexagonal, que representa la manera más efectiva de subdividir el plano, utilizando el menor perímetro posible. Los hexágonos minimizan el “borde” de una sección y, así también, la cantidad de material necesario para hacerla. Por eso las abejas construyen sus celdillas de esta forma, ya que, gastando la misma cantidad de cera, consiguen mayor superficie para guardar su miel. ¡Qué eficientes resultaron ser estos insectos!
Podemos encontrar casos similares en varias otras situaciones. Por ejemplo, ¿has visto lo que sucede cuando se amontonan pompas de jabón? Una burbuja es perfectamente esférica cuando está aislada, pero fíjate en el aspecto que adquieren cuando se pegan unas a otras.
La creación
del hombre, en el intento de imitar la perfección de la naturaleza,
también ha puesto su mirada en la eficaz forma hexagonal. El arquitecto
Antonio Gaudí, se inspiró en el modo en que las abejas edifican
sus panales, de arriba hacia abajo, para la construcción de los
arcos catenarios que podemos encontrar en varios de sus edificios. Por
ejemplo, en una de sus obras, el Palacio Güell, tenemos que su cúpula
central parece flotar, dando la sensación de estar colgada, mientras
su superficie está cubierta con hexágonos regulares a semejanza
de un panal.
![]() |
(Pincha aquí para ver el vídeo) |
Pero aún hay más ejemplos:
Los humanos también hemos llegado a darnos cuenta cómo amontonar de forma eficiente discos cilindros o esferas. Los círculos de la izquierda son obleas de Silicio (discos muy finos) dispuestas en un panel fotovoltáico para aprovechar al máximo la energía solar. De nuevo nos aparece el empaquetamiento hexagonal compacto. |
¿Podrías decir cuantas naranjas estarían en contacto con una naranja del interior del montón? |
Pero además, si miramos con detalle dentro de cada fibra, veremos filamentos todavía más delgados, hos de niobio que de forma ESPONTÁNEA también se han ordenado formando un empaquetamiento compacto hexagonal !. Esa geometría es la que permite empaquetar un número dado de filamentos en el mínimo espacio. Si cogemos un montón de pajitas de refrescos (como en la foto), o lápices o palillos y los apretamos firmemente con la mano o con una goma elástica eso es precisamente lo que se forma: un empaquetamiento compacto hexagonal |
Todos los ejemplos anteriores eran de sistemas artificiales;
hechos por el hombre (o por las abejas). Podría parecer que estas
estructuras son un signo de inteligencia (se podría decir quizá
que las abejas son también bastante "inteligentes", ya que son capaces
incluso de orientarse y comunicarse instrucciones de navegación!).
Pero pronto veremos ejemplos sorprendentes de empaquetamiento hexagonal en lugares insospechados que nos forzarán a rechazar esa atractiva y autoindulgente hipótesis. En este caso nos encontramos nuestra ya conocida estructura hexagonal pero a nivel celular, formando tejidos complejos autoorganizados.
Para terminar esta sección, un bonito ejemplo de
sistemas naturales y artificiales con características comunes: Los
paneles usados en dispositivos artificiales de visión nocturna también
se fabrican con un empaquetamiento compacto hexagonal de microdetectores.
|
Después de todo las células pueden quizá ordenarse siguiendo las instrucciones preestablecidas y codificadas en el ADN, ¿no?. No parece gran cosa ¿cierto?. Pero ¿y si te dijera que ciertas reacciones químicas, mantenidas lejos de su equilibrio termodinámico, pueden dar lugar a sistemas heterogéneos con empaquetamiento hexagonal?. En principio eso sería tan sorprendente como echar tinta en un vaso de agua y llegar a obtener un líquido moteado!. Y sin embargo, algo muy parecido es lo que sucede en el caso de la figura de la izquierda. La reacción entre los iones clorito y yoduro en presencia de ácido malónico (reacción CIMA, para abreviar) es reversible, es decir puede tener lugar en una dirección o en la contraria. Cuando esta reacción se deja evolucionar lejos del equilibrio, por ejemplo en un reactor alimentado en continuo, y gracias a procesos espontáneos de difusión molecular, dicha reacción da lugar a zonas ricas en yoduro (de color azul en la figura) y zonas pobres en yoduro (de color amarillo) que se ORDENAN ESPONTÁNEAMENTE formando nuestro familiar empaquetamiento compacto hexagonal. Y estas curiosas reacciones químicas nos guardan también otras sorpresas. Por ejemplo, aunque la estructura hexagonal es la más estable de las dos, pequeñas variaciones en la concentración inicial de reactivos en la misma reacción CIMA Por cierto, ¿no te resultan terriblemente familiares estas formas ?. Lo cierto es que en la Naturaleza podemos encontrar diseños semejantes aquí y allá. A continuación te presento algunas fotos con ejemplos en este sentido, pero probablemente puedes encontrar muchos más. (Mueve el ratón encima de cada una para averiguar de qué imágenes se trata).
Probablemente esto es algo más que pura casualidad. ¿No
te parece?.
|
Y ahora nos introduciremos... en el mundo de los átomos.
Pues sí, porque ahí también encontraremos empaquetamiento compacto hexagonal. De hecho es un ejemplo clásico. Si consideramos los átomos como simples esferas no nos sorprenderá que cuando se aglomeren (por ejemplo en muchos metales a temperatura ambiente o en ciertos gases a temperaturas muy bajas) lo hagan como se indica en la figura. No sólo los átomos neutros se empaquetan de esta forma. Los iones (átomos con carga eléctrica) también lo hacen, siempre y cuando sus cargas queden neutralizadas de forma efectiva por otros iones de carga opuesta y tamaño adecuado para situarse en algunos de los huecos intersticiales de la estructura (en las cavidades de forma triangular que quedan entre esferas). |
Bueno... pues parece que se nos han acabado los ejemplos de sistemas
con empaquetamiento compacto hexagonal. ¿O quizá no?.
Pues no.
Ya para acabar, como epílogo, te muestro a continuación unos pocos ejemplos más...
Pues no.
Ya para acabar, como epílogo, te muestro a continuación unos pocos ejemplos más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario