jueves, 3 de julio de 2014

El Susurro de la Caracola, Maxim Huerta; Never Forget, Greta Salóme & Jónsi (Iceland - Eurovision 2012)





Hay un momento de nuestras vidas en que decidimos proteger todo lo que no
nos gusta con hielo, ignorándolo bajo cero, sin saber que enfriando lo mantenemos
todo de manera intacta. Es el archivo fatal, el que parece invulnerable para
hacernos vulnerables con los años. Una canción a destiempo destroza.


Cuando rascas el hielo de los recuerdos, aparecen dentro todos los olvidos que han
sido almacenados voluntariamente (o no),ahí se han quedado archivados por cortesía
de la memoria, que actúa de forma diplomática cada año. Sin embargo no hay más que sentir un poco de calor cerca-con una canción, con un aroma, con una mirada, con una pregunta-para que empiecen a descongelarse involuntariamente sacándolos afuera.


Una palabra también. Los más mayores, pienso ahora en mi abuela, al final de sus días optan
por dejar todos los recuerdos al aire, sin la protección del frío que los mantiene callados.
Como la carne, al aire se van pudriendo, olvidando, desgastando, fermentando…,
pero nosotros, ahora, no podemos porque tenemos miedo…y el hielo del miedo los conserva.







La ciudad del viento, Quique Gonzalez




Dice esta canción que cada uno tiene una "Ciudad del Viento " particular, ese lugar que lleva escrito un nombre en particular, un rincón donde todo sabe, huele... a esa persona.
Es el viento otras veces el encargado de traernos su nombre allá donde vayamos, allá donde estemos, y entonces sucede que todos los lugares tienen el mismo nombre escrito en la paredes...



"La Ciudad Del Viento"
Hay una calle que lleva tu nombre
en la ciudad del viento...

Cada siete olas


Hoy, navegando por la red, encontré este texto. Me hizo pensar, pensar en varias cosas de la vida.

Lo dejo aquí para que podáis leerlo, quien sabe, a lo mejor alguien también reflexione después de leerlo