Momentos de lectura: El bautizo de la ola, JpTorga




Alguien les había dicho, que el amor era para adolescentes. En algún lugar habían escuchado que eso de enamorarse era cuestión de química. Hasta que aquel día llegaron a aquella playa. El Sol se asomaba entre las nubes con disimulo. El viento mecía de forma agradable sus cabellos. Casi sin pretenderlo sus manos se juntaron, mientras paseaban por la arena. Con aquel gesto sellaron un contrato no escrito de complicidad. Un ligero hormigueo recorrió al unisono su pecho. Hablaban de cosas banales, que para ellos eran importantes. Se comunicaban con la mirada, con el roce de sus manos. Los dos usaban el lenguaje del silencio para regalarle al otro palabras sinceras. Las gaviotas danzaban a su alrededor cantando desde sus picos afilados. El mar quiso bautizar su unión con una ola que regó sus zapatos. Aquel gesto del agua les hizo reír como niños  rompiendo el miedo a lo desconocido. Luego vino una caricia, mas tarde un beso, a continuación un abrazo... El mundo se paró sobre la arena, el vello de su piel se erizaba con cada gesto de ternura que se entregaban a la sombra de las nubes. Para ellos, aquel era su momento. Era el instante que habían deseado vivir durante mucho tiempo. Era un obsequio de la vida, el regalo de un día de otoño, que les indicaba que en su vida quedaban muchas páginas por escribir. Cuando, cada uno de ellos aquel día se fue a la cama, algo más les unía, la ilusión de sentirse jóvenes... 

 

Desde Cuando Alejandro Sanz


Ya no duele porque al fin ya te encontré
Hoy te miro y siento mil cosas a la vez
Mira si busqué, mira si busqué
Tengo tanto que aprender
Todo lo que tengo es tu mirar

De mis recuerdos salen brisas a bordar
Las locuras que tú me quieras regalar
Y mira si busqué, mira si busqué
Tengo tanto para dar
Reconozco puertas que yo sé
Se abren solamente alguna vez
Así de poco

Desde cuando te estaré esperando
Desde cuando estoy buscando
Tu mirada en el firmamento, estás temblando
Te he buscado en un millón de auroras
Y ninguna me enamora como tú sabes
Y me he dado cuenta ahora
Puede parecer atrevimiento
Pero es puro sentimiento
Dime por favor tu nombre

Yo te llevo por las calles a correr
Vamos lejos más allá de lo que crees
Y si pregunto bien, si pregunto mal
Tengo tanto que ofrecer
Abro puertas que alguien me cerró
Y no busco más sentido a mi dolor

Mira no me vuelvas loco

Desde cuando te estaré esperando
Desde cuando estoy buscando
Tu mirada en el firmamento, va temblando
Te he buscando en un millón de auroras
Y ninguna me enamora como tú sabes
Y me he dado cuenta ahora
Puede parecer atrevimiento
Pero es puro sentimiento
Dime por favor tu nombre
No me vuelvas loco

Desde cuando te estaré esperando
Desde cuando estoy buscando
Tu mirada en el firmamento, va temblando
Te he buscando en un millón de auroras
Y ninguna me enamora
Y al final cuando te encuentro
Estabas sola


Sonata del claro de luna (fragmento), de Yannis Ritsos


Nos sentaremos un momento arriba, en lo alto,
y con el soplo de la primavera
podremos incluso imaginar que volamos,
porque muchas veces, y aún ahora, confundo
el susurro de mi vestido
con el de dos fuertes alas que se agitan,
y envuelta en ese sonido de vuelo
siento prieto el cuello, las costillas, la carne,
y así, hecha un ovillo, entre los músculos del
cielo azul,
entre los vigorosos nervios de la altura,
ya no importa si voy o si vuelvo,
ni tiene importancia que haya encanecido mi
cabello
(no es eso lo que me apena -lo que me apena
es que no encanezca también mi corazón).
Deja que vaya yo contigo.
Ya sé que cada uno anda solo en el amor,
solo en la gloria y en la muerte - solo.
Lo sé, lo he probado. No sirve de nada.
Deja que vaya yo contigo.




El fabuloso mundo del Dragón


El dragón (del latín draco, y este del griego δρακων, drakon, ‘víbora’ o ‘serpiente’) es un animal mitológico que aparece en diversas formas en varias culturas de todo el mundo, con diferentes simbolismos asociados.
Las interpretaciones más familiares de dragones son los dragones europeos, derivados de la tradición popular y de la mitología de Grecia, Escandinavia y Oriente Próximo, y también las de dragones orientales. La palabra dragón deriva del griego δράκων (drákōn), "dragón, serpiente de gran tamaño, o serpiente de agua", que probablemente viene del verbo δρακεῖν "ver claramente".

Características

La representación de un dragón en la Puerta de Istar, en Babilonia.

En función de las diversas culturas que lo han representado, la figura del dragón juega un papel importante como dios o guardián, o como monstruo y poderoso enemigo. Se le atribuyen cualidades y habilidades tales como ser poseedor de una gran sabiduría y conocimiento o pecar de gran avaricia y codicia que le conduzca a devastar poblaciones enteras para apilar gigantescos tesoros. Por lo tanto, la imagen y figura del dragón ha ido variando y ha sido interpretada de muy diversas formas a lo largo de la historia.
Las culturas occidentales y orientales han imaginado reptiles gigantes y alados; puede ser debido al contacto con cocodrilos, caimanes o gaviales.
Los dragones occidentales tienen por lo general apariencia de un gran lagarto o cocodrilo, con alas, aliento de fuego, cuernos y gran ferocidad. Los dragones orientales tienen por lo general apariencia serpentina mezclada con características de otros animales, estos casi nunca tienen alas.
Los dragones han sido famosos a lo largo de los años en la literatura y en el mundo cinematográfico.

Explicación del mito
El mito de la existencia de los dragones se sustenta en una diversa cantidad de leyendas y representaciones, diseminadas entre las distintas culturas que lo representan. Se ha planteado, como explicación de este fenómeno, el descubrimiento de fósiles de dinosaurio que llevasen a esas culturas a imaginar seres parecidos. También cabe señalar que los dragones en cada cultura presentan aspectos y características diferentes.
Así, en la Edad Media, se creía que los cadáveres de cocodrilo, traídos a mercados y demás sitios de exhibición desde Egipto y Arabia durante la época de Las Cruzadas, se trataban de cadáveres de dragón.

Dragones según distintas culturas
El simbolismo alrededor del dragón es esencialmente el de la lucha. La lucha entre el dragón y un héroe o un dios tiene, sin embargo, distintos significados. En estos míticos combates el dragón asume dos papeles, el de devorador y el de guardián, que tienen finalmente una sola raíz: el de un ser cósmico en espera, cuya acción implica la muerte –o el nacimiento– de un orden universal.
Así, en un principio, los dragones fueron devoradores de dioses –algunos mitos se refieren a los dragones como la causa de los eclipses, por ejemplo–, o sus enemigos –caso de Apofis y Pithon, enemigos del sol–; posteriormente los dragones fueron fuerzas a la que se les ofrecían doncellas en sacrificio y no tardaron en concebirse como comedores de hombres. De todos modos, ese papel no se aleja del de guardián, que implica la espera y el mantenimiento de un orden que preludia una reinvención del universo o el descubrimiento de un lugar sagrado. Justamente porque son guardianes de algo sagrado, es por lo que simbolizan el puente a otro mundo o la prueba de todo héroe.
Las actitudes tomadas en las culturas del mundo frente a la figura del dragón y la lucha que supone se distancian en ocasiones, particularmente si se compara la idea de dragón que existe en el lejano Oriente con la predominante en Occidente. Los dragones chinos (o long), los japoneses (o ryū) y los coreanos son vistos generalmente como seres benévolos, mientras que los europeos son en su mayoría malévolos.
Sin embargo, los dragones malévolos no están restringidos a Europa: entre otras culturas, esta interpretación se mantiene también en la mitología persa. El tema es complejo y ha variado a lo largo de la historia. Como ejemplo, entre los romanos, típicos representantes del Occidente antiguo, el dragón era considerado un símbolo de poder y sabiduría.
 
Oriente

Oriente cercano
En Oriente Próximo, la figura del dragón, simbolizaba el mal y la ruina. En Enuma Elish, una epopeya escrita alrededor del 2000 a. C., la diosa Tiamat era un dragón que simbolizaba los océanos y comandaba las hordas del mal, cuya destrucción previa era necesaria para crear un nuevo universo ordenado.
También en la Biblia hebrea el dragón representa el mal. En la mitología persa destaca el caso de Azi Dahaka, un dragón malévolo. En Rumanía, se habla del dragón geta-dacio, que tenía cabeza de lobo y cola de serpiente. Esta imagen era empleada en la guerra ya que en la bandera de Dacia aparece un dragón.

Lejano Oriente

Estampa japonesa de un dragón.
En muchas culturas orientales los dragones eran, y en algunos cultos son todavía, reverenciados como representantes de las fuerzas primitivas de la naturaleza y el universo.
En Oriente, el dragón siempre se ha considerado una criatura benéfica y un símbolo de buena fortuna.
Sello oriental con la imagen de un dragón.
A diferencia de sus congéneres occidentales, los dragones orientales no escupen fuego ni tienen alas, aunque normalmente pueden volar gracias a la magia. Un dragón típico de Oriente tiene cuernos de ciervo, cabeza de caballo, cuello de serpiente, garras de águilas, orejas de toro y bigotes largos como los de los gatos. En las leyendas chinas hay dragones que vigilan los cielos, dragones que traen la lluvia, y dragones que controlan los ríos y arroyos. En Japón, donde se los tiene por seres sabios, amables y siempre dispuestos a ayudar, los dragones han sido, durante siglos, el emblema oficial de la familia imperial.
Los dragones chinos y japoneses simbolizan el poder espiritual supremo, el poder terrenal y celestial, el conocimiento y la fuerza, y por lo tanto son benévolos. El dragón es la insignia más antigua del arte de estos países. Proporcionan salud y buena suerte y viven en el agua. Según las antiguas creencias chinas, traen la lluvia para la recolección. Es por eso que el dragón se convirtió en el símbolo imperial de ese país.
En el Himalaya representan la buena suerte.
Corea, como se dijo antes, también tiene sus dragones, de similar carácter positivo.

Europa
Las tribus nórdicas de Europa asociaban su folclore con varios aspectos terroríficos del dragón.
La mitología germana incluye al dragón (Nidhug o Níðhöggr) entre las fuerzas del inframundo. Se alimenta de las raíces de Yggdrasil, el fresno sagrado que extiende sus raíces a través de todos los mundos. Los antiguos escandinavos (los vikingos), adornaban las proas de sus naves esculpiéndolas en forma de dragón. Usaban esta decoración en la creencia de que así asustarían a los espíritus (Landvaettir) que vigilaban las costas a las que llegaban. También los dragones aparecen en poemas germanos: en Beowulf, un poema épico anglosajón, el más antiguo que se conserva. Un hombre llamado Beowulf, que había librado a su pueblo de un monstruo mitad hombre y mitad diablo, luego, ya convertido en el rey, lucha contra un dragón, disputa en la que ambos mueren. En el Cantar de los Nibelungos, un poema épico medieval anónimo, Sigfrido mata a un dragón, llamado Fafnir, y al ungirse con su sangre se hace inmune a todo mal.
Para los celtas, el dragón era una divinidad de los bosques, cuya fuerza podía ser controlada y utilizada por los magos. Entre los conquistadores celtas de Britania fue símbolo de soberanía, y durante la ocupación romana de la isla adornó los estandartes de guerra, convirtiéndose en un símbolo heráldico y luego militar.
Entre los romanos, como se dijo más arriba, el dragón era considerado un símbolo de poder y sabiduría.
Para la mitología eslava, el dragón era una de las formas que adoptaba el dios Veles, señor del Mundo Subterráneo, adversario de Perún, dios del trueno.
Los cristianos heredaron la idea hebrea del dragón, que aparece en el Apocalipsis, del apóstol Juan, y en otras tradiciones posteriores. En el arte cristiano del Medievo simboliza el pecado y al aparecer bajo los pies de los santos y mártires representa el triunfo de la fe y los reinos cristianos sobre el diablo. La leyenda de San Jorge y el dragón, ilustrada en la figura de la derecha, muestra claramente este significado.

En el simbolismo medieval la idea de lucha contra dragones sirvió para fortalecer la motivación de los reinos cristianos. Se presentaban a menudo también como representaciones de la apostasía, la herejía y la traición, pero también de cólera y envidia, y presagiaban grandes calamidades. Varias veces significaban la decadencia y la opresión, aunque sirvieron también como símbolos para la independencia, el liderazgo y la fuerza.
Los colores a menudo determinaron el simbolismo que un dragón tenía. En la pauta del viaje del héroe, los dragones representaron el obstáculo o el temor, y el paso necesario para volver al hogar, y como muchos dragones se presentan también como la encarnación de la sabiduría, en esas tradiciones matar a uno de ellos no sólo daba acceso a sus riquezas sino también significaba que el caballero había vencido a la más astuta de las criaturas. Otra faceta del dragón en la mitología clásica de la época caballeresca es el dragón como guardián que custodia o secuestra princesas en sus castillos.
En el occidente de la actualidad es casi siempre concebido como una criatura malvada, poderosa y cruel, estereotipo extraído tanto de las antiguas leyendas como de las más modernas películas.

América
La mayoría de los autores llaman serpientes a los dragones mesoamericanos, pero ya que etimológicamente la palabra dragón significa serpiente entonces tomaremos el término cóatl como dragón en el caso de los seres mitológicos mencionados a continuación en lugar del significado literal "serpiente" para diferenciarlos de las serpientes y víboras, las que tienen sus propios significados.
Mesoamérica

Quetzalcóatl, Códice Borbónico.
En la Mesoamérica prehispánica existe una gran tradición de veneración a la serpiente como animal sagrado. Gracias al intercambio cultural debido en gran medida a las constantes guerras de conquista de algunos imperios mesoamericanos y el intercambio comercial de otros tantos, no era de sorprenderse que muchos pueblos compartieran no sólo creencias, sino que los dioses extranjeros súbitamente formaran parte integral de un panteón dado. De esta manera las criaturas mitológicas también eran absorbidas por la gente e incluidas en el folclore y religiones de dichas naciones.
Las serpientes mesoamericanas a menudo son acompañantes de dioses a quienes asisten en sus deberes. Tal es el caso del dios tutelar de los tenochcas, Huitzilopochtli, a quien un dragón de fuego asiste como arma. Algunos dioses responsables de la lluvia (excepto Tlaloc) montan serpientes de viento mientras lanzan dardos y flechas a las nubes ocasionando la lluvia.
Algunas características casi siempre presentes en las serpientes mesoamericanas son:
  • Cuerpo serpentino o de serpiente.
  • Plumas (en tocado o como símbolo de divinidad).
  • Capacidad de volar.
Así pues, ejemplos de los dragones mesoamericanos son:
Nahuas
Si bien los nahuas son un grupo étnico, su cultura influenció a los pueblos adyacentes, particularmente a los que adoptaron su lengua, como los aztecas que se asentaron en el Valle y se convirtieron más tarde en mexicas, pero estas categorías de dragones eran reconocidas por la mayoría de las culturas nativas del Valle de México.
Ehécatl -- Serpiente de viento. Decían los antiguos nahuas que el dragón de viento barría con su aliento la tierra preparándola para recibir el regalo del agua divina, de esta manera se explicaban que el viento que sopla anunciando la inminente lluvia.
Mazacoatl -- Serpiente venado. Este tipo de serpientes son viciosas, mitad venado mitad serpiente, es un ser que disfruta al seducir a los mortales para después devorarlos. Desempeña un papel similar al de las sirenas o las arpías de la mitología griega.
Ocelocoatl -- Serpiente Jaguar. La serpiente jaguar tiene la mitad anterior del cuerpo como el de un jaguar y de la cintura a la punta de la cola tiene el cuerpo de una serpiente. Ésta simboliza la tierra (jaguar) y el agua (serpiente) en relación dependiente la una de la otra.
Quetzalcóatl -- Serpiente preciosa. La traducción literal anteriormente usada de ‘serpiente emplumada’ ha ido cambiando conforme a nuevos hallazgos e interpretaciones de las culturas nahuas. El término "quetzalli" en el caso de Quetzalcoatl significa precioso debido al plumaje reluciente del dragón, recordemos que las plumas eran utilizadas por los pueblos americanos a manera de joyas y las plumas del quetzal eran las más preciosas de todas, de ahí que el término haya pasado de ‘serpiente emplumada’ a ‘serpiente preciosa’ o ‘hermosa serpiente voladora’ que es un término más conceptual y no una mera traducción literal. Así bien, la serpiente preciosa posee un plumaje de brillantes colores en donde predomina el verde turquesa, además de un gran tocado de plumas rodeando su cabeza a manera de melena. Y en una pirámide está representado que en el equinoccio baja una serpiente del cielo. Aparece representado en muchas culturas como ornamento en muchas partes, desde vasijas ornamentadas hasta templos y edificios. La serpiente preciosa es casi exclusivamente identificada con el dios tolteca Quetzalcóatl, el que fue reverenciado por múltiples culturas del Valle de México como los teotihuacanos, los propios toltecas y hasta los tenochcas, como podremos evidenciar en el arte de cualquiera de estos pueblos. Alfonso Caso lo traduce como "mi gemelo precioso", debido a que Venus aparece a un lado y otro del cielo, representando a Quetzalcóatl y Tezctlipoca, según sea de mañana o al caer la noche.
Xiuhcóatl -- Serpiente de fuego. Se trata de una serpiente color verde turquesa que puede verse en los cielos nocturnos cuando cruza el firmamento a toda prisa como estrella fugaz. Su apariencia es similar a la de la ‘serpiente preciosa’, pero se puede diferenciar ya que en algunas ocasiones es representado como rojo con flamas turquesa alrededor de su cuerpo y con un tocado de largas plumas en vez de la melena característica de la serpiente preciosa, además, frecuentemente se representa con un cascabel en la punta de la cola.
Mayas (Quichés)
Tepew y Kukumatz: según las historias del Popol Vuh, Tepew y Kukumatz fueron dos dioses que tomaron forma de serpientes y dieron forma y orden a todo lo creado por Corazón del Cielo a partir del caos primitivo. Cabe destacar que Kukumatz comparte muchas características con el maya Kukulkán o el tolteca Quetzalcóatl.
No obstante lo anterior, varios estudiosos de las culturas mesoamericanas no consideran correcto utilizar el concepto de "dragón", para referirse a las serpientes sagradas objeto de culto de dichos pueblos.
Sudamérica
En torno a Los Andes se creía en el poder que ejercían las "serpientes del abismo marítimo y de la montaña esplendorosa". Estas eran criaturas de grandes proporciones que también son considerados dragones. Así por ejemplo, las que se veneraban en los Andes centrales difieren de aquéllas de los extremos del Imperio Inca (Ejemplo: pueblos nativos de Perú o Bolivia).
Las bestias de la mayor parte de Sudamérica estaban ampliamente relacionadas con enormes serpientes que se remontaban con los orígenes de la humanidad, coincidiendo con otras regiones del planeta. Pero, a diferencia del viejo mundo, estos dragones no presentan unicidad ni en sus características predominantes ni en sus actitudes, aún siendo de aspectos semejantes. De hecho, tales dragones mantenían una historia de conflictos entre sí que se remonta al primitivo pasado de las culturas americanas. La leyenda de Ten Ten y Cai Cai Vilu refleja esto, al enfrentarse ambas serpientes (Mar y Tierra) por el futuro del pueblo Mapuche.
Para los Muiscas, pueblo indígena de Colombia, creían en Chiminigagua, dios creador en forma de serpiente de fuego bajo a la sagrada laguna de Iguaque, y creó a los padres de la humanidad, Bachue y su joven acompañante, vivieron y tuvieron hijos, que después de un tiempo los dejarían hasta convertirse en dos serpientes acuáticas para vigilar a su pueblo, dentro de la laguna de Iguaque; tiempo después el primer Zaque de la sabana de Bogotá, Hijo de Sue o el sol (o de Chia, la Luna o deidad maligna) era un hombre en forma de dragón de color verde.

Apariciones en el imaginario moderno

Puente del Dragón en Alcalá de Guadaira.


La mitología moderna ha empleado recurrentemente el símbolo del dragón, extendiendo su pervivencia en el imaginario; pero también ha usado su imagen reduciéndolo a un poderoso monstruo casi invencible. Las múltiples apariciones de dragones, sin embargo, hacen uso frecuente de elementos tradicionales e innovadores en la criatura, que amplían sus alcances y estimulan más la imaginación, dando así lugar a un sinfín de dragones con diversas cualidades y variantes. Como ejemplos representativos se pueden mencionar los dragones del legendarium de J. R. R. Tolkien, cuyo máximo exponente es el Smaug de El hobbit, los dragones de las novelas de Memorias de Idhún, de Laura Gallego García, o los dragones que constituyen uno de los elementos más relevantes del universo del juego de rol Dungeons & Dragons. También podemos encontrar a Fujur en La historia interminable o los dragones-montura de la serie de historietas El Mercenario. También es un buen ejemplo la película Cómo entrenar a tu dragón, en la que se pueden observar distintas formas de dragones.

El mundo del dragón: una fantasía hecha realidad
En el año 2005, el Discovery Channel, a través de su afiliada Animal Planet, produjo un documental titulado «El mundo del dragón: una fantasía hecha realidad» realizando de manera fantástica la recreación de lo que podría haber sido la extinción de esta supuesta especie. La producción es una conjunción de ficción, supuestos y leyendas, con una amplia descripción de posibles patrones de conducta animales de apareamiento, alimentación y comportamiento.
La producción del Discovery Channel cuenta la historia de una hembra de dragón que trata de sobrevivir para alimentar a su cría.
Esta historia fue ambientada en Rumanía (donde la leyenda de los dragones era fuerte), en la Edad Media.
Explica que un grupo de estos animales que escupían fuego habrían podido vivir en la época de los dinosaurios, que escaparon a la aniquilación adaptándose a vivir en el agua y que más tarde se expandieron por todo el planeta, dominando selvas y conquistando montañas.
En la historia mostrada en este documental, los caballeros rumanos (vestidos con los atuendos típicos de la Edad Media) suben a la montaña y matan a la madre y a su cría, acabando así con la especie.

Dragones a través de la historia

Dragones serpientes
  • Leviatán - Bestia descrita en el libro de Isaías.
  • Jörmundgander - La serpiente de Midgard.
  • Uróboros - Dragón serpiente representada con su cola en su boca, expresa un ciclo.
  • Azi Dahaka - Serpiente demoníaca en la mitología de la persa zoroástrica.
  • Trentren Vilu y Caicai Vilu - Gigantescas serpientes de la leyenda del diluvio araucano en la mitología mapuche.
  • Xianlong - Dragón serpiente de la cultura china. Un dragón poderoso y sabio.
  • Amaru - Serpiente alada gigante con cabeza de llama, hocico rojizo y cola de pez, este mito perteneció a la cultura incaica.
  • Cuélebre - dragón de las mitologías de Cantabria y Asturias.
Dragones clásicos
  • Ladón - Dragón de cien cabezas que cuidaba las manzanas de oro.
  • Fafnir - Cuya sangre hizo casi invulnerable a Sigfrido.
  • El dragón de Wantley - Dragón de Inglaterra que ofrece una peculiar pelea.
  • Níðhöggr - Dragón de Niflheim en la mitología nórdica.
  • El dragoncito del Monte Pilatos - Cuya sangre era mortal.
  • Herensuge - Dragón de la mitología vasca.
  • Lagarto de la Malena - Dragón de una leyenda de Jaén.
  • El Dragón de Vilardell - Dragón que aterrorizaba Sant Celoni, entre Gerona y Barcelona, muerto por Soler de Vilardell
Dragones del cielo
  • El Piasa - El dragón pájaro de Illinois.
  • Amphipteres - Serpiente alada con cabeza de dragón, inofensiva para los humanos.
  • Quetzalcóatl - La serpiente emplumada azteca.
Otros seres y criaturas semejantes
  • Gárgola
  • Basilisco
  • Tarasca
  • Salamandra
Dragones de la literatura, cine y videojuegos
  • Shenlong - Dragón de Dragon ball, Dragon ball Z y Dragon ball GT con la habilidad de conceder un deseo cuando se reunían las 7 bolas mágicas.
  • Igneel el padre adoptivo de Natsu Dragneel el protagonista de la serie Fairy Tail
  • Lockheed - Un dragón extraterrestre que funge como mascota de los X-Men de Marvel Comics. Fué creado por Chris Claremont y Paul Smith en Uncanny X-Men vol. 1 # 166, en 1983.
  • Smaug - Dragón de Bilbo el Hobbit de J.R.R. Tolkien.
  • Acnologia - El Dragón Negro del Apocalipsis, es un poderoso dragón que parece estar volando en todo el continente o el mundo
  • Glaurung - Dragón de El Silmarillion de J.R.R. Tolkien.
  • Ancalagon - También dragón de El Silmarillion de J.R.R. Tolkien.
  • Fújur - Dragón de la suerte de La historia interminable de Michael Ende.
  • Yandrak - Último dragón de Memorias de Idhún de Laura Gallego García.
  • Mushu - El guardián del clan FA en la película Mulán
  • Domivat - Dragón visionario de Memorias de Idhún encarnado en la espada del mismo nombre.
  • Alexstrasza - la Reina de los Dragones en el universo de World of Warcraft.
  • Ysera - líder de los dragones del Vuelo Esmeralda en el universo de World of Warcraft.
  • Alamuerte - líder de los dragones del Vuelo Negro y antagonista principal de World of Warcraft: Cataclysm.
  • Draco - un dragón de la película Dragonheart: corazón de dragón.
  • Takhisis - diosa de la oscuridad y reina de los dragones malignos en la saga de Dragonlance.
  • Silvara - dragona plateada de la saga de Dragonlance.
  • Bowser - dragón antagonista de los juegos de Super Mario
  • Fin Fang Foom personaje ficticio que aparece en historietas publicadas por Marvel Comics. El personaje aparece por primera vez en Strange Tales # 89 (octubre 1961), y fue creado por Stan Lee y Jack Kirby.
  • En el videojuego The Legend of Zelda aparecen varios dragones, siendo uno de los más destacados "Volvagia" en The Legend of Zelda Ocarine of Time.
  • En el videojuego Metroid, Ridley (uno de los líderes de los Space Pirates) y su versión mecánica (Meta-Ridley o Mecha-Ridley) es un dragón espacial.
  • Saphira - dragona azul de Eragon en la tetralogía de El legado.
  • Furia Nocturna, mejor conocido como "Chimuelo" - dragón protagonista de la película de Cómo entrenar a tu dragón.
  • Tipo Dragón - el tipo dragón, uno de los 17 tipos elementales de Pokémon.
  • Drogon, Viserion y Rhaegal - son los tres dragones que nacen al final del primer libro de la saga Canción de Hielo y Fuego, del autor George R.R. Martin. Los tres dragones son criados por Daenerys Targaryen, la legítima heredera del trono, que vive en el exilio. Son los últimos dragones que quedan con vida y son hermanos.
  • Balerion, Meraxes y Vhagar - Los dragones de Aegon el conquistador y sus hermanas Visenya y Rhaenys Targaryen de la saga canción de hielo y fuego, del autor George R.R. Martin.
  • Bahamut - En el mundo de Final Fantasy es el rey de los dragones. Él realmente no es un dragón aunque tiene varias de sus características. En el primer juego utiliza su poder para fortalecer a los protagonistas y a partir del tercero comenzó a aparecer como personaje invocable donde los personajes lo llamaban para que les ayudase. Su ataque más poderoso es el Megafulgor.
  • Akatosh: el dios del tiempo, que adopta la forma de un dragón para enfrentar a Mehrunes Dagon en la Crisis de Oblivion, dentro del universo de The Elder Scrolls.
  • Spyro: un dragón de color morado de una saga de videojuegos englobados bajo el nombre de Spyro the Dragon.
  • Alduin: líder de los dragones en el videojuego The elders scrolls V: Skyrim
  • Paarthurnax: dragón anciano que ayuda al Dragonborn en The elders scrolls V: Skyrim
  • Ohdaviin: Dragón rojo, mano derecha de Alduin y posteriormente subordinado de Dohvakiin en The elders scrolls V: Skyrim
  • Kushala Daora, Lao Shan Lung, Fatalis, Teostra, Lunastra, Yamatsukami, Chameleos, Alatreon, Amatsumagatsuchi, Raviente, Rukodiora y Guran-Miraosu de la serie de videojuegos Monster Hunter.
  • Draconis, Mercurio, Sadist y Thombor: dragones que aparecen en la novela Raisie de Patrick Tenebrae.
  • Jacinda: protagonista de la novela juvenil de Sophie Jordan: Firelight. Donde los dragones son llamados ¨Draki¨.
  • Spike: pequeño dragón bebé ayudante de Twilight Sparkle en la serie My Little Pony: Friendship is Magic.
  • Lindwelm Sirius: personaje del one-shot yaoi "Close your Eyes", de Fusanosuke Inariya, donde Lindwelm es un humano que se convierte en dragón y se enamora de su amo.
 
Fuente:

es.wikipedia.org



 Poema
 La luna del dragón

Hablábamos de los dones de la tiniebla.
De los amores muertos.
Cuando se perfiló sobre el Oeste
El oro espeso de la media luna.
"Mira: es la Luna del Dragón" —me dijiste.
Y los dos la miramos
Como si algo terrible pesara sobre el mundo.
El hemisferio gris parecía lleno
De hondos presentimientos.
No había una estrella sobre el mar en calma
De humaredas y torres.

Nadie dijo: "Es la luz que hace al Dragón visible".
Nadie dijo: "Es la casa donde el Dragón habita".

Nadie dijo: "Es la luna que ampara a los dragones".
Miramos simplemente el cuerno rojo.
La sobrehumana forma que doblegaba al cielo.
Y pensamos acaso en los terrores
De la culpa y la fiebre.

"Sólo es la Luna del Dragón" —me dijiste.
Pero algo negro ascendió de mi infancia
Y di gracias a Dios de no estar solo.

Seguimos en silencio
Mientras las nubes negras cercaban en la hondura
Aquel objeto de alta magia y belleza.
—"Tal vez el nombre viene de las baladas celtas".
—"Yo no sé por qué pesa y aflige como un sueño".

Era la Luna del Dragón, y nadie
Parecía comprenderlo.
Iban las multitudes, bulliciosas, urgentes,
Atentas sólo a su pequeño misterio,
Mientras sobre las hondas avenidas
Un oro atroz vertía su intemporal influjo,
Y algo terrible y bello batía sus alas rojas
Como un polvo impalpable sobre las tristes tierras.



Selección: Eduardo Milán y Ernesto Lumbreras


William Ospina




La princesa y el dragón